Desde el pasado 1ro de marzo, la Unión Europea y Perú están aplicando el nuevo acuerdo comercial que consiste en la apertura recíproca de  mercados. Mediante este tratado, ambas partes esperan mejorar las condiciones de inversión y lograr fuertes ahorros por concepto de aranceles. Resta aún la ratificación en algunos Estados miembros de la UE para que entre en vigencia formalmente; sin embargo, desde la fecha mencionada las  empresas interesadas pueden beneficiarse de las normas que fueron acordadas de manera provisoria. Según representantes de ambas partes, acuerdo mejora las condiciones de inversión y abre sensiblemente el mercado, al tender a largo plazo con la eliminación de los aranceles a productos industriales y pesqueros.  Las disposiciones del acuerdo incluyen también una salvaguarda de Derechos Humanos que contempla la posibilidad de suspender el convenio por una de las partes si queda acreditado que la otra vulnera esta garantía. También cuenta con exigencias para el respeto de los convenios internacionales sobre derechos laborales y protección del medio ambiente.